Esto es, precisamente, lo que no debemos hacer con estos monumentos rústicos que de tantos apuros nos han sacado : ensuciarlos y/o restaurarlos con poca pericia y menos gusto, si cabe. Éste no lo conozco bien, pero otros que se encuentran en los caminos que frecuento habitualmente están bastante peor. No puede ser que algo tan valioso ( me refiero al contenido, o sea, el agua ) se haya despreciado tanto. Tantos años dando de beber a todos los semovientes del término - y a los de los arrieros- para acabar de basureros. Si son capaces las cámaras actuales ( que sí) de fotografiar el fondo de estos pozos, veremos todo tipo de objetos inservibles que tiran algunos " humanos", sobre todo los guarros. Lo de utilizar los pozos urbanos como alcantarillas me parece tan lamentable que no se merece, de momento, ni media palabra.