Desde donde está hecha esta foto, que es desde el pico de uno de los cerros del Santo Niño, se puede divisar simultáneamente, el pueblo, la ermita del Santo Niño, el cerro de las Maricas y el cerro de La Atalaya (incluso la Casa Marisol). Si no habéis estado nunca en esta ubicación, la próxima vez que vayáis a la Ermita del Santo Niño os invito a que veáis esta panorámica en la vida real. Al menos a mí, me emocionó ver desde un único lugar tantos sitios emblemáticos de nuestro pueblo.